¿Qué es todo esto del Cerebro Digital y Físico?

Cuando tomamos cualquier decisión o realizamos cualquier tarea, necesitamos conocimiento, sabiduría. Este conocimiento y sabiduría, no solo puede venir de nuestras neuronas, cerebro físico, sino también desde un cerebro digital.

Con la diferencia de que un cerebro digital no necesita repasar la información para retenerla a largo plazo. Sin embargo, si que necesitamos saber estructurarla para recuperarla y colocarla sobre nuestra mesa de trabajo.

Ahora te sonará tan extraño como me sonaba a mí hace un tiempo. Lo mismo me pasó con Internet, las criptomonedas, la inteligencia artificial... todo suena extraño hasta que vive entre nosotros.

Dentro de unos años todos tendremos un Cerebro Digital, solo está por saber la fecha.

Pirámide del Conocimiento

En 1998 Rusell Ackoff pionero y uno de los mayores expertos en gestión del conocimiento definió la pirámide del conocimiento. En ella representaba las distintas capas de la información en función de la utilidad para nosotros. Definió de menos (base) a más importante (cúspide) las siguientes capas:

sabiduría (nuestros modelos mentales)
conocimiento (información ya asimilada por nosotros)
Información (información que capturamos pero está explicada por un tercero)
Datos (toda la información externa que nos rodea en nuestro día a día)

Ahora, gracias a las herramientas digitales, una de las capas, la del conocimiento, se puede dividir en dos. Una, la información que hemos procesado con nuestro cerebro físico (memoria a largo plazo) y, dos, la información que hemos procesado en nuestro cerebro digital ya disponible para colocarla en nuestra memoria a corto plazo (mesa de trabajo) en cualquier momento.

Cerebro Físico (Aprendizaje)

Nuestro Cerebro Físico es capaz de retener grandes cantidades de información pero con una limitación muy crítica. La información debe ser repasada periódicamente como el que riega una planta para que no se muera.

Si esta información no se repasa, esta información se queda en datos sin más y nunca se transformará en conocimiento (memoria a largo plazo).

Sin embargo, en el momento de leer o escuchar algo, si que nos acordamos perfectamente. Y esto nos lleva a confiarnos, se produce lo que los expertos llaman la falsa expectativa del aprendizaje. Creemos que sabemos algo. Y es cierto durante unas horas, pero terminamos olvidándolo a los pocos días. Esto fue estudiado por el experto en aprendizaje Hermann Ebbinghaus que modeló en la curva del olvido donde los humanos olvidamos de forma exponencial lo que hemos aprendido, si no lo repasamos.

Cerebro Digital

Sin embargo, ahora con las nuevas herramientas digitales que permiten estructurar la información en redes, tal y como la almacena nuestro cerebro físico, podemos almacenar información en un Cerebro Digital para evitar tener que repasar todo lo que queramos recordar.

Pero un Cerebro Digital no va de almacenar notas en formato digital sin más. Esto es una visión muy superficial y ridícula. Esto ya lo hacíamos con Word o Evernote.

Un Cerebro Digital guarda la información integrándola en una red de nodos, ensamblando la nueva información con la que ya teníamos. Replicando el sistema de nuestro Cerebro Físico como en la imagen oscura donde cada punto es información enlazada e integrada como en una red de neuronas.

Además un Cerebro Digital nos permite realizar muchas otras tareas: automatizar la captura de información, procesarla con nuestras palabras, encontrar patrones comunes para mejorar la retención, aumentar la productividad y, la más importante, controlar la información que nos rodea. Pero esto, lo explico mejor dentro si te suscribes.

El poder de combinar ambos CF+CD

Ahora, tanto si has desarrollado capacidades de aprendizaje de tu Cerebro Físico, como has creado tu Cerebro Digital, puedes usar ambos cerebros para tener un mayor conocimiento, la sinergia del aprendizaje.

El objetivo es delegar, a tu Cerebro Físico, las tareas más frecuentes y que tu cerebro digital se encargue de todo aquello que tu memoria a largo plazo no pueda asimilar. Así tu Cerebro Digital puede rescatar información y colocar en tu mesa de trabajo (memoria operativa) para descargar a tu cerebro físico y liberarte del estrés y tener más tiempo para aprender lo que realmente necesites.

Ambos funcionan como en una fábrica donde tu Cerebro Digital recupera los bloques de información (del almacén) que necesita justo a tiempo (JIT) para incorporar en el proceso de fabricación (memoria operativa cerebro físico) para tomar una decisión o realizar una tarea (producto final) que repercute en tus activos personales y profesionales (distribución).

Memorizar o aprender más de lo que puedas repasar es una perdida de tiempo. Céntrate en lo que puedas recordar. El resto delégalo a tu Cerebro Digital para que éste trabaje por ti. Igual que en una fábrica, acumular lo que no necesitas es un gasto fijo de recursos que lastra tu beneficio final.

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